Hace más de 3.000.000 años un mono del África oriental decidió que quería ver qué pasaba más allá del horizonte y se irguió sobre sus dos patas, los brazos en jarras y los ojos semicerrados y sin duda el tío si se le puede llamar así dijo: “Leñe…. ahí está el futuro”
Allí estaba el futuro. Y allí a su lado estaba “Lucy”, esa mona enana que es la antecesora de todos los que ahora estamos aquí. Ese homínido de apenas 130 centímetros de altura y con un cuerpo mas bien deforme resultó ser algo así como la Eva que todos conocemos. La misma que hizo morder la manzana al mono peludo que tenia al lado y cambió definitivamente la historia de la incipiente humanidad.
No voy a entrar en suposiciones de las costumbres sexuales de ese par de antecesores debido a la poca documentación de la que dispongo. Es de suponer que ventilaban los momentos de pasión de un modo más o menos automático, si bien es cierto que los arqueólogos, bueno… de hecho a Lucy la encontró una arqueóloga inglesa, no han encontrado restos de preservativos ni de utensilios similares.
Tampoco se ha encontrado ningún utensilio hábil para labores depilatorias. Ni crema depilatoria, ni gilletes extra sensor ni crema rápida weet. Lucy jamás se arrancó un pelo de su pequeño cuerpo para resultarle más atractiva a sus compañeros. Y sus costumbres no depilatorias siguieron inalterables entre sus descendientes durante aproximadamente 2.996.000 años, hasta que a las mujeres egipcias se les ocurrió una nueva manera de someter las pasiones masculinas al mundo del consumo. Hacia tiempo que se habian inventado el maquillaje y ahora a la Cleo de turno se le ocurrió sacarse el pelo de las axilas. El escándalo fue de categoría. Entrábamos de lleno en la época de las mujeres celofán, de las diosas de piel de terciopelo capaces de dar mil formas a su vello púbico.
Y hemos llegado al día de hoy en que ya parece una utopía encontrarse una mujer que tenga algo de pelo en algún punto que no sea su cabeza. Que gran error! No se hasta que punto todo este nuevo concepto de belleza está patrocinado por las multinacionales de la depilación, o si los todopoderosos magnates de corporaciones publicitarias y de moda son gente a los que les da terror atragantarse con un pelo en la garganta. ¡Quizá las chicas han decidido que su nuevo look depilado es más femenino. Yo personalmente jamás se que cara poner ante un coño depilado. Cuando ves aquella raja mirándote con cara de boba no sabes a que atenerte.
Afortunadamente en Orgasmatrix hemos encontrado unas nuevas pioneras del vello que están dispuestas a que esta vieja tradición perdure. Chicas que saben jugar al escondite y con las que jamás pasarás frió en invierno. Que no te hagan comer la manzana querido. Que después del primer mordisco vas a echar de menos esas inmersiones en el mundo del pelo.
Dr. TorpedoX
Comentarios