Ava Devine

Poco se sabe de su vida pre-porno, y de hecho es un tema que a menudo rehuye en las entrevistas, pero la fama como felactriz se la ha ganado a pulso.

Para empezar, entró en el negocio con 29 años y aspecto de cuarentona, lo que le supuso sumar sus energías al por entonces recién nacido nicho de las MILF en el que Ava encajaba como un guante al lado de las célebres Rayveness, Francesca Le, Tiffany Mynx y demás adorables cuarentonas. Su ascendencia italiana, hispana y china además le sirvieron para que sus ojos rasgados le dieran un toque distintivo de cada a aquellos aficionados a un mercado tan raquítico como el de las asiáticas maduras. Si a esto le sumamos unos pechos descomunales (38F que tuvo que reducirse a 38DD debido a un rechace de los implantes) y a que esta neoyorkina personifica el paradigma de la ninfómana más salida que el pico de una plancha y dispuesta a follarse a todo lo que se mueva (su currículum es muy extremo e incluye salvajadas como bukkakes, dobles penetraciones interraciales y hasta un bizarro gang bang en el que se pasó por la piedra a tres transexuales sin operar), uno comprende perfectamente por qué la amiga Ava lleva prácticamente una década entre las 20 pornstars más populares, y no parece tener intención de dejarlo.