El siguiente vídeo de Camsoda tiene ya unos meses pero me ha pillado tan desprevenido que me siento en la obligación de compartirlo con la parroquia orgasmátrica porque se trata de una de esas extrañas piezas de porno que combinan lo absurdo con lo erotizante, y cuyo efecto es cuanto menos difícil de describir. Así reza la frase que acompaña al vídeo: «Un dinosaurio tiranosaurus rex persiguiendo el gran culo de Kelsi Monroe sobre un hoverboard no es algo que uno vea todos los días». Vaya que sí. No es la primera vez que vemos a pornstar follando con extraños seres, y aunque a la excelsa starlet le entre la risa cada dos por tres durante el polvo (posiblemente pensando «qué demonios estoy haciendo con mi vida»), no deja de ser el cuerpo de Kelsi Monroe sudoroso, lúbrico y penetrado.
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