Lisboeta de nacimiento, Katty Soarez ha tenido un brillante inicio en el porno, dado que ha filmado poco más de una decena de escenas, y la mayoría de ellas en productoras de renombre. Es de suponer que le ha ayudado en gran medida su indudable atractivo, con un físico curvilíneo propio de una pornstar con empaque; esto es, tetas bien operadas y prominentes y una tentadora retaguardia que no duda en ponerla al servicio de las inclinaciones sodomitas de sus amantes y del público. Así que los disparos por detrás no le son ajenos a esta llamativa portuguesa que, a diferencia de sus amantes, apunta alto, al igual que su pezones prominentes, que miran erguidos al cielo de la gloria.

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