Creo que las últimas veces que hemos hablado de Darla Crane, la madura tetona pelirroja aún no había roto la barrera de los cincuenta, pero ahora sí que sí: la legendaria starlet californiana cumplió en mayo los 51 y se está empezando a acercar peligrosamente a otra cifra que muy pocas serán capaces de alcanzar en esta industria: si sigue en activo, en 2020 cumplirá nada menos que 30 añazos trabajando en el mundo del erotismo. Hay algo de trampa en este conteo, eso sí: entre 1990 y 1999 estuvo rodando (y también dirigiendo) softcore exclusivamente, escenas en las que todo era impostura y nadie se manchaba las manos realmente, pero ya con la llegada del nuevo milenio Darla sí que se decidió a subir el nivel y entrar de lleno en el porno. Desde entonces, salvo por algún descanso puntual, su trayectoria ha sido ininterrumpida e incluso hoy, con su medio siglo a las espaldas, no le tiembla el pulso a la hora de demostrarle quien manda a un jovenzuelo lleno de energía como Buddy Hollywood. Quién dijo que las segundas partes nunca fueron buenas no puedo haber visto follando a Darla Crane.
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