Tarra White

Esta checa con cara de desayunar hombres indefensos todas las mañanas es uno de esos casos de vocación absoluta e indiscutible; un ser sexual nacido para follar cuanto más mejor y exhibirse a todas horas, una mujer nacida para el porno. Los datos apoyan esa misma idea: con solo cinco añitos, Tarra ya decía que quería ser stripper, y practicaba sus danzas en su cuarto; con trece años decidió que prefería ser actriz porno; y a los dieciséis empezó a practicar con su primer novio formal.

Fue a los 18 recién cumplidos cuando Tarra realizaba por fin su sueño de debutar en el porno, y lo hacía con más descaro que nadie: el mismo día en que llegaba a la mayoría de edad (y todavía yendo al instituto) lo celebraba rodando su primera escena… ¡en plena calle! ¡de día! ¡frente a una universidad! Probablemente uno de los estrenos más locos de la historia del porno europeo.

Conocida menos popularmente como Tarra Light, Martha, Susie o Chrissy, la brutal starlet checa no ha parado de encandilar a los fans con su cuerpazo retocado posteriormente con algo de silicona y una actitud cada vez más voraz en escenas donde no le importar ejercer la iniciativa o dejarse someter. Con ella todo vale.