Hace poco descubrimos a través de Twitter que Mercedes Carrera es una de las no pocas pornstars de ancestros latinos que apoya políticamente a Donald Trump y sus ideas sobre inmigración. Hasta aquí la contradicción podría ser solo relativa, porque Mercedes nació en Estados Unidos, pero hay una faceta de su carrera que en principio tampoco parece llevarse muy bien con el conservadurismo: Mercedes Carrera acaba de publicar la que es su tercera escena porno con actrices transexuales. Las dos primeras fueron primero con Aspen Brooks y después con River Stark en la premiada cinta Transition de la productora Transsensual, y la más reciente es su encuentro con Nikki Vicious en TS Factor #8 de Evil Angel. Supongo que todos convivimos con nuestras propias contradicciones.
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