Durante la década pasada los pornófilos asistimos a la irrupción de Carmella Bing, su ascenso al estrellato… y su transformación en ballenato. Los kilos desbordaron su figura en los últimos años de su carrera, aunque había quien la preferían con esas formas más redondeadas. Retirada hace un par de años, Carmella ha conseguido algo que parecía imposible: volver a recuperar el tipo que tenía cuando empezó en lo del porno. Sus enormes tetas, claro está, siguen ahí, pero al servicio de una MILF bastante más atractiva, cómo demuestra en las fotos que sube a su cuenta de twitter.
¿Cuál habrá sido el secreto de Carmella para superar su reto de 30 kilos? Ella, de momento, no ha contado el plan. Pero se confiesa feliz y contenta, dedicada a criar a su hijo de 2 años y a su arte, puesto que siempre le ha gustado pintar y planea sacar un libro de recetas ilustrado por ella. Eso sí: ahora mismo anda sin novio y recuperándose de su adición al sexo. O sea, que la famosa dieta el cucurucho no ha tenido nada que ver.
Para que comparéis os dejamos dos vídeos, el primero en su momento más glorioso y un segundo con la Carmella más decadente y rolliza. Aunque más de uno la pillaba con ganas. Ya lo decía La Trinca: «Quiero una novia pechugona».
Carmella Bing en sus mejores días
Una oronda y grande Carmella Bing
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